La enseñanza del Español en el Nivel Básico

Introducción

En este trabajo se hablará sobre lo que es el lenguaje y su relación con la enseñanza en el nivel básico. Porque es algo que utilizamos cada día y se manifiesta en diferentes maneras. ¿Qué podríamos hacer sin el lenguaje? Probablemente segaríamos siendo inteligentes, pero demasiado frustrados. No tendríamos cómo compartir nuestras experiencias, ideas, es decir, no tendríamos como expresarnos y comunicarnos.

Nosotros desde niños somos empujados a aprender el lenguaje por la necesidad de comunicarnos. Y mientras vamos creciendo aprendemos que existen reglas para expresarnos correctamente. Somos corregidos por nuestros padres y ya cuando se ingresa a la educación formal por nuestros maestros. Y uno descubre que en realidad el lenguaje lo utilizamos para todo, para satisfacer nuestras necesidades.

La enseñanza del Español en el nivel Básico

El lenguaje es una herramienta mental y cultural que habilita el pensamiento y construye el aprendizaje mediante el mismo, de la misma forma promueve la reflexión. El lenguaje sirve para distintos propósitos tales como: dibujar, hablar, leer, escribir, pensar, comunicarse, entre otras cosas. En la educación básica, es de gran importancia el desarrollo del lenguaje o la enseñanza del español ya que se pretende que los alumnos adquieran las cuatro habilidades para comunicarse que son: hablar, escuchar, leer y escribir.

En cuanto al aspecto social, el lenguaje, juega un importante papel; ya que ésta es un arma cultural universal con la cual los individuos adquieren información, contenidos, habilidades, estrategias, etcétera. Según Vygotsky el lenguaje tiene un origen social ya que éste requiere de intercambios sociales debido a que el lenguaje es productivo y receptivo.

Las habilidades lingüísticas se clasifican de la siguiente forma, según el código oral o escrito y el papel receptivo o productivo que tengan en la comunicación. En el código oral están escuchar y hablar, en el escrito están leer y escribir. En el papel receptivo se encuentra escuchar y leer y en el productivo hablar y escribir. Un aspecto importante que se debe tener en cuenta es que las habilidades lingüísticas no funcionan corrientemente aisladas, sino suelen utilizarse integradas entre sí para llevar a cabo una misma tarea que es la comunicación. Ya que el acto de comunicarse implica el empleo de estas habilidades mencionadas anteriormente.

Los niños son empujados a aprender el lenguaje por su necesidad de comunicación en la sociedad en que se desenvuelven. Ya que es mediante ella que los infantes se expresan con diferentes propósitos. En gran medida, el desarrollo del lenguaje interviene directamente de los procesos de aprendizaje. E.B. Smith sugiere que el desarrollo cognitivo tiene 3 fases: percepción en la que el niño atiene los aspectos particulares de la experiencia, la ideación en donde el niño reflexiona y la presentación en la que el conocimiento es expresado de alguna manera.

El proceso de adquisición del lenguaje primeramente se da en el hogar, para después terminarse de desarrollar en el ámbito escolar. La enseñanza del lenguaje en la escuela se facilita cuando el lenguaje es total y significativo para el niño, es decir cuando se le da la importancia y/o relevancia que este merece. También se facilita cuando se tiene un propósito, ya sea para comunicar información, expresar sentimientos, entre otras cosas. Asimismo el lenguaje debe de tener un significado es decir que el alumno entienda los conceptos de las palabras que utiliza o escucha. Estos aspectos favorecen el aprendizaje del lenguaje.

La competencia comunicativa es la capacidad de una persona para comportarse de manera eficaz y adecuada en las diversas situaciones sociales que se presentan cada día; ello implica respetar un conjunto de reglas que incluye tanto las de la gramática y los otros niveles de la descripción lingüística (léxico, fonética, semántica) como las reglas de uso de la lengua, relacionadas con el contexto sociohistórico y cultural en el que tiene lugar la comunicación. Es decir que un individuo comprenda ciertos aspectos que se toman en cuenta para entablar conversaciones tales como: esperar turnos para hablar, ya que uno de ellos debe de hablar mientras que el otro escucha y viceversa; otro aspecto es comprender el tema de la conversación y mantener la lógica dentro de esta misma; así también se debe de tomar en cuenta la formación de oraciones estructuradas gramaticalmente correctas al momento de entablar conversaciones. En el contexto escolar se pretende favorecer en los niños esta competencia comunicativa tanto oralmente como por escrito eficazmente.

La narración, ya sea de algún suceso o de un cuento, es una herramienta importante para el lenguaje sobre todo en preescolar porque fortalece el habla y el escucha y se relaciona con la observación, la memoria, la imaginación, la creatividad, el uso del vocabulario, la comprensión, entre otras cosas.

En cuanto al lenguaje escrito, este es mucho más que un conjunto de formas gráficas ya que los niños deben aprender a decodificar símbolos y signos que para ellos, al principio, no significan nada; pero conforme estos símbolos son asimilados, estos cobran sentido y pasan a ser relevante para los alumnos. Ellos inician su aprendizaje del lenguaje escrito en diferentes contextos ya que la escritura forma parte del paisaje urbano en que se desenvuelven. En la escuela se procura que ellos experimenten un ambiente motivador para la fomentar la lecto-escritura.

El desarrollo de la expresión oral y escrita constituye de hecho, la puerta de entrada al sistema de educación formal y es la base del trabajo educativo en las distintas áreas de conocimiento. Ya que para la construcción del aprendizaje en distintos ámbitos es necesario el lenguaje. Debido a que este nos permite transmitir y recibir información de cualquier aspecto. El lenguaje nos brinda la oportunidad de reflexionar, compartir, adquirir y acrecentar los conocimientos.

El propósito educativo de la enseñanza de la lectura y la escritura es obligatoria ya que se pretende formar a los alumnos como ciudadanos de la cultura escrita y esto se logra mediante el empleo de diferentes prácticas educativas que generen un aprendizaje significativo en ellos. En la educación preescolar se procura enseñar a los niños las bases del lenguaje escrito para que en la educación primaria puedan desarrollarlo favorablemente. La educación básica se rige por los estándares curriculares los cuales permiten usar con eficacia el lenguaje como herramienta de comunicación para seguir aprendiendo.

Existen una gran gama de actividades que como profesores podemos realizar para que los alumnos desarrollen de manera eficaz las habilidades lingüísticas y que exista ese equilibrio entre las cuatro. Porque hay que reflexionar sobre el tiempo que se dedica a utilizar cada habilidad y la importancia que le damos. Normalmente las habilidades orales son las más practicadas pues tradicionalmente se entendía que el objetivo primordial de la escuela era enseñar a leer y escribir y se daba a entender que los infantes ya sabían hablar. Pero no hay que olvidar que la capacidad de comunicarse es la suma de las cuatro habilidades lingüísticas y no solo el dominio separado de cada una de ellas

El desafío que se tiene en la educación básica es formar personas que se interesen en el mundo de la lectura y escritura y que sepan cómo comunicarse tanto oralmente como por escrito. Otro desafío es que los alumnos logren promover el descubrimiento y la utilización de todas las habilidades lingüísticas como reflexión sobre su propio pensamiento y así organizar sus conocimientos.

Cuando el alumno empiece a interesarse por la lectura ya sea para informarse, por entretenimiento o para aprender, es decir, aplique el hábito de la lectura, comenzará a interesarse por la escritura para recuperar información y organizarla o comunicar sus ideas, después vendrá a querer expresarla en eventos comunicativos de manera oral en el que intercambiará ideas con otras personas y se fomentará la escucha. Consecuentemente el acercamiento de los alumnos al conocimiento y el uso eficiente de diversos tipos textuales adquieren relevancia; por lo que se da el importante avance en la concepción del aprendizaje y la enseñanza de la lengua.

Como futura docente tengo el desafío de lograr el desarrollo de estas habilidades de la lengua en mis alumnos y que ellos estén realmente interesados en ello, aprovechando el tiempo en aula y de estar en constante capacitación para transformar la enseñanza.

Conclusión

“El lenguaje es el bien más precioso y a la vez el más peligroso que se ha dado al hombre.”
Friedrich Hölderlin

El lenguaje es el instrumento que utilizamos por diferentes razones. Con él ampliamos nuestro conocimiento. Mediante las diferentes habilidades lingüísticas nos relacionamos con nuestro entorno. La razón por la cual me gustó esa frase es porque por medio del lenguaje podemos hacer una infinidad de cosas, pero a veces no se usa de la manera correcta y es contraproducente.

Como futuras docentes tenemos que crear ese ambiente propicio para que los niños obtengan el lenguaje y vayan adquiriendo progresivamente los elementos necesarios para que se expresen, comuniquen sus ideas y sobre todo se enriquezcan de conocimientos.

Referencias

Bodrova, Elena y Leong D. (2004). Tácticas para propiciar el desarrollo y la enseñanza-aprendizaje, en Herramientas de la mente. México: Pearson/SEP (Biblioteca para la actualización del maestro), pp.67-120 [título original: Tools of the Mind: a Vygostskian Approach to Early Childohood, 1996]

Cassany, D. et al. (2000). Enseñar lengua. Barcelona: Graó.

Kaufman, A. M. (2007). Leer y escribir: el día a día en las aulas. Buenos Aires: Aique Grupo Editor.

Lerner, D. (2001). Leer y escribir en la escuela. Lo real, lo posible y lo necesario. México: SEP.

Ministerio de Educación. Lenguaje y comunicación. Educación Básica Consultado el 24 de marzo de 2014 en: http://ww2.educarchile.cl/UserFiles/P0001/File/curriculum_al_dia/bases_lenguaje_2012.pdf

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